5 claves para prosperar en la vida
Aunque normalmente se liga la Era de la Información a la aparición de Internet y a las nuevas posibilidades que nos ofrecen las tecnologías de la información y la comunicación, en realidad va mucho más allá de esto. El fin de la Era Industrial supone múltiples transformaciones a nivel laboral, económico y social a las que necesitamos adaptarnos para sobrevivir y prosperar.
Era de la Información: las reglas del juego han cambiado
Los cambios socioeconómicos de los últimos años requieren de un cambio en nuestra mentalidad y acciones. Las recetas del siglo XX con las que hemos sido condicionados ya no sirven para sobrevivir y prosperar en la actual Era de la Información, con unas reglas del juego totalmente distintas.
La robotización y digitalización
Los avances de la ciencia nos han traído muchísimos beneficios en nuestro día a día. Sin embargo, es una realidad cada vez más palpable que la tecnología está sustituyendo muchas funciones que antes llevábamos a cabo los seres humanos. En los próximos años, seremos testigos de cómo cada vez las máquinas y los robots ganan protagonismo en los procesos productivos, ocupándose de las tareas más mecánicas y dejando fuera del mercado laboral a muchísimas personas.
La globalización y deslocalización
Si no había suficiente con la digitalización, las nuevas tecnologías hacen que la presencialidad ya no sea tan importante, favoreciendo que las empresas puedan contratar a personas de los llamados “países en vías de desarrollo”. Esto aumenta mucho la competencia y, por ley de oferta y demanda, los sueldos de los empleados de los “países desarrollados” disminuyen. Y esto en el mejor de los casos, ya que muchos de ellos directamente perderán el empleo.
Los títulos universitarios no son suficiente
En el siglo XX el consejo predominante era: sé buen estudiante y consigue una carrera universitaria. Y la promesa a todo esto es que encontrarías un trabajo seguro y próspero hasta la jubilación. Hoy en día, en líneas generales, el consejo sigue siendo el mismo. No obstante, la promesa cada vez se cumple menos. Competir por currículum ya no es una buena estrategia, la clave está en aprender a competir con talento y capacidad de aportar valor.
El fin del Estado del Bienestar
Otra de las promesas que se derrumban en la Era de la Información es que pagues impuestos durante toda tu vida laboral y conseguirás una buena sanidad, educación y jubilación por parte del Estado. La realidad es que los servicios prestados por el gobierno son cada vez más caros y de menor calidad, y que la deuda pública no para de crecer. Si hablamos de la jubilación, esta no se sostiene por ningún lado. En países como España se necesita que la población activa financie la pensión de los retirados, pero la población cada vez envejece más, por lo que el sistema es insostenible.
Era de la Información: las ventajas que nos ofrece
No todo es malo en el cambio de era socioeconómica. Como la mayoría de transformaciones, no es ni buena ni mala, sino que nuestros resultados dependen de nuestra capacidad para adaptarnos a ella. Para conseguirlo tendremos que abrir la mente para desaprender todo lo que ya no nos sirve y para recibir una nueva forma de pensar y de hacer.
Una nueva concepción del trabajo
En el siglo XX vivimos en una burbuja de aparente seguridad, en la que teníamos mayor certeza sobre nuestro trabajo e ingresos económicos. Aunque esto tenía su parte positiva, también propició una cultura del trabajo basada en la obligación, la monotonía y el interés propio. En la Era de la Información se desvanece la ilusión y volvemos a la realidad: nada es seguro en este mundo. No obstante, al ser conscientes de la incertidumbre, gozamos de más coraje para crear una profesión que nos aporte pasión, realización y significado. De hecho, enfocar la función profesional desde esta perspectiva es clave para prosperar en la nueva era.
Mayor libertad e independencia
Mientras que en el siglo XX la figura predominante fue la del empleado, a día de hoy está en decadencia. Al haber cambios constantes, las empresas prefieren flexibilidad. Por otro lado, los trabajadores se dan cuenta de que ser empleado, en realidad, no es nada seguro. Y que, además, estás otorgando tu libertad a la compañía por la que trabajas.
La Era de la Información permite mayor independencia para que los trabajadores desarrollen sus propios proyectos como profesionales independientes, además de que cada vez está más instaurado el teletrabajo, el cual permite mayor conciliación entre la vida personal y profesional.
La facilidad de emprender
Debido a que los empleos fijos cada vez son menos comunes, emprender es más atractivo para muchas personas. Las nuevas tecnologías ofrecen maneras de crear negocios con muy poca inversión inicial y una escalabilidad relativamente alta. Además, ante los numerosos cambios a todos los niveles surgirán más oportunidades de negocio, así como funciones profesionales inéditas para satisfacer nuevas necesidades del mercado.
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5 claves para prosperar en la Era de la Información
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Desarrolla tu propósito
Encuentra aquello que te hace insustituible. Dedica tiempo a conocer y desarrollar tus talentos y pasiones, así como a encontrar aquello que le da sentido a tu vida. Cada ser humano es singular, tiene unas habilidades y motivaciones personales e intransferibles. El gran error de la Era Industrial fue deshumanizar el trabajo; en la Era del Conocimiento, retomar tu parte más humana y creativa es primordial.
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Ten mentalidad emprendedora
Aunque seas empleado, piensa como un emprendedor. Es decir, ten iniciativa para proponer nuevas soluciones, sé proactivo y mantén en tu mente la idea de proporcionar productos o servicios que puedan cubrir las necesidades de otras personas, así como solucionar problemas existentes en la sociedad. ¡Deja de mirar solo por ti mismo y busca contribuir al bien común!
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Adapta tu mente al cambio constante
Nuestra mente no está acostumbrada a los cambios rápidos y disruptivos que experimentamos, cada vez de forma más intensa, en la Era de la Información. Para ello es importante desarrollar nuestra inteligencia emocional, lo que nos permitirá ser más resilientes y tomar mejores decisiones. Recuerda que el primer paso para aprovechar el cambio es dejar de luchar contra él.
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Deja de confiar en el Estado
El gobierno no te va a ayudar, sino más bien todo lo contrario. Debido a la ineptitud de los políticos, en unos años tendrás que hacerte cargo de pagar una inmensa deuda y un sistema de jubilación que no se sostiene y del que tú no te podrás aprovechar. Por tanto, coge las riendas de tu educación, tu salud y tus finanzas para ser lo más independiente posible.
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Invierte en ti mismo
En la Era de la Información se requiere un cambio de mentalidad que solo podemos transitar a través de nuevas fuentes de conocimiento. Por ejemplo, encontrar tu vocación es fundamental para gozar de ingresos recurrentes a la vez que disfrutas de una profesión que te gusta y que tiene sentido para ti. Sin embargo, nadie nos ha enseñado esto en el colegio, por lo que te toca tomar las riendas y buscar la educación que te ayude a transitar con consciencia este gran cambio.
Aunque en esta nueva era hay más información a nuestro alcance, también es más difícil separar el grano de la paja. En Kuestiona llevamos años ayudando a nuestros alumnos a transitar el cambio de paradigma en todas sus facetas. Para ayudarte a transitar el cambio profesional ofrecemos el Máster en Orientación Vocacional, una formación destinada a personas que están cansadas de su trabajo actual, que no saben cuál es su verdadera vocación ni cómo reinventarse. En ello va a descubrir tus talentos y saber cómo vivir de ellos para finalmente alcanzar a la felicidad.